Cerramientos de terraza de aluminio en Alicante: guía útil

06 Nov 2025
5 min lectura
Carpintería de Aluminio
Cerramientos de terraza de aluminio en Alicante: guía útil
Guía práctica para dueños de vivienda en Alicante: cómo elegir cerramientos de terraza de aluminio (corredero, plegable), qué vidrio y perfiles convienen, precios orientativos, comparativas de sistemas y marcas, mantenimiento anti-salitre y viento, trucos de limpieza y engrase, y un FAQ sobre licencias, plazos de instalación y garantías.

Antes de cerrar tu terraza en Alicante: lo esencial

Si estás pensando en cerrar la terraza en Alicante, empieza por lo que de verdad manda: la orientación y el salitre. Si vives en San Juan Playa, el viento de levante te mete arenilla y humedad; en Elche, el polvo se nota más en los carriles. Por eso, prioriza perfiles con rotura de puente térmico y un vidrio que frene el calor. En la práctica funciona muy bien un 4+4/16/4 bajo emisivo con control solar: en agosto el salón no se recalienta tanto y el suelo deja de “arder”. Piensa también en el uso: si sueles abrir a diario para ventilar, una corredera es cómoda; si quieres estanquidad extra en primera línea, valora corredera elevable o abatibles en los laterales. Detalle que muchos pasan por alto: el carril inferior. Uno bajo evita tropiezos, pero necesitas buen drenaje para que la gota fría no te meta agua. Y sí, las juntas (EPDM) y las escobillas hacen más por el ruido de lo que parece. ¿Ejemplo real? Piso en Benalúa con tráfico: al cerrar con doble vidrio y perfiles sellados, las llamadas ya no se escuchan eco en el salón, y en invierno la manta sale menos del cajón.

Materiales y configuraciones que funcionan (con números realistas)

Hablemos claro: el aluminio sin RPT en fachada sur de Alicante se calienta como una sartén. Mejor perfiles con RPT (Rotura de Puente Térmico) y acabado pensado para costa: anodizado marino o lacado Qualicoat Seaside. En vidrio, para terrazas vivibles todo el año, el clásico efectivo es 4+4/16/4 bajo emisivo con control solar; si te pega el sol de 12 a 18 h, sube a un control solar selectivo (tipo 70/35) y notarás tardes más frescas sin dejar la terraza en penumbra. Corredera de 2 o 3 carriles si abres mucho; si prefieres vista limpia, combina fijo + hoja corredera en los paños más expuestos. ¿Cortina de cristal o aluminio “cerrado”? La cortina es discreta y ventila a tope, pero aísla menos en invierno y en primera línea el salitre la castiga más. Sobre dinero: precios orientativos por m² en la provincia — corredera básica sin RPT desde 180–300 €/m²; con RPT y vidrio bajo emisivo, 350–600 €/m²; elevable o grandes luces, más. No es tarifa, es para que compares presupuestos con cabeza y mismo “paquete” técnico.

Trámites, montaje y esos detallitos que ahorran disgustos

Antes de medir, pregunta si tu comunidad permite cerrar la terraza: el permiso de comunidad suele ser clave y algunos Ayuntamientos piden comunicación o licencia menor (sobre todo si alteras fachada). En obra, mide pendientes de suelo y define por dónde desagua: revisa drenajes del vierteaguas y deja una pequeña rampa al exterior para que la lluvia no entre. Planifica persianas, mosquiteras y enchufes desde el minuto uno (luego es un dolor). Plazos habituales: visita y medidas, dibujo sencillo, fabricación en 2–4 semanas y montaje en 1 día para 6–10 m² si el hueco está listo. Mantenimiento en costa: limpia con agua dulce cada mes si estás cerca del mar (perfiles, carriles y herrajes), seca y aplica lubricante seco en ruedas. Pide microventilación en herrajes para evitar condensaciones en noches húmedas. Detalle estético: RAL 7016 queda moderno, pero en muchas comunidades piden blanco 9016; mejor confirmar por escrito. Y un último truco: solicita una visita de ajuste a los 6 meses (escobillas, presiones de cierre) cuando todo “asienta”. Esa media hora marca la diferencia en cómo cierra el conjunto.

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